Chuí cumple 24 años de Emancipada y uno de los actores de dicho momento fue sin lugar a dudas Mohamed Kassem Jomaa. Recurrimos a él para que nos recuerde como se vivieron esas épocas donde el sueño era la independencia.
«Claro que sí, jamás me voy olvidar» comienza diciendo el reconocido empresario de la frontera como si viviera nuevamente esos días a través de la memoria. «La verdad que muchos no recuerdan, pero los que estuvimos en el baile mismo no tenemos como olvidarlo porque dos veces perdimos la emancipación en Porto Alegre».
Y es que el camino no fue fácil. «Nos cambiaron, un Diputado que ya es fallecido nos cambió por varios Municipios en el Norte de Rio Grande do Sul. Ahí la quedamos». El intento se hizo una vez más con el mismo resultado negativo. «Y la tercera la vencimos», señala sonriendo.
«Si a mi me preguntan, yo soy emancipacionista de naturaleza. Creo que la emancipación trae progreso. En Chuí está la prueba de que por lo menos somos independientes, no dependemos de Santa Vitória para nada. Ah no ser por el Juzgado en Santa Vitória y el Forum. Pero hay muchas cosas que antes no habían acá y hoy hay».
«Y una de las cosas más importantes es una o dos ambulancias que hoy tiene la prefectura y que están las 24 horas a disposición de la comunidad. Antes no había ninguna, ni médico había. Hoy tenemos médico durante el día, Puesto de Salud que funciona las 24 horas con enfermera de padrón en la noche, te llevan a Santa Vitória, a Pelotas o a donde haya necesidad de llevar al paciente».
«No fue fácil pero creo que valió la pena», medita Mohamad.
Chuí «pegó un gran cambio y un cambio para mejor. Algunos dirán que las calles están a la miseria, bueno las calles siempre estuvieron a la miseria. Hay algunos prefectos que las arreglan más, otros que las arreglan menos. Esperemos que Marco Antonio, ahora en breve las empiece a arreglar. Ya está juntando dinero y comprando balastro para esas cosas, que no es fácil, mirar de afuera es una cosa y cuando estás adentro es otra».
«Te puedo decir que estuvimos escondidos hasta debajo de una mesa, solo los que estaban saben lo que fue. Lamentablemente de esas personas hay dos que no están más, León Bermúdez y Roberto Bertelli, los cuales también lucharon infinitamente para que Chuí se pudiera emancipar, ambos grandes líderes».
«Estaban también Agenor y Claudio Cava, quien nos ayudó también. Nunca me voy a olvidar. En la Asamblea Legislativa, no recuerdo en que lugar estábamos allá y entró el Prefecto de Santa Vitóri, venía llegando y justo venía a la sala donde estábamos nosotros. En un costado había una mesa con manteles, bueno ahí, tres o cuatro nos metimos bajo las mesas con manteles».
«Escuchamos todo lo que el habló y nunca supo que nosotros estábamos allí. Esa fue una de las veces que fuimos traicionados. No solamente por el Prefecto, al cual no responsabilizo, aunque no me doy con él hoy; y si responsabilizo al Diputado que nos dijo que nos iba a apoyar y después nos cambió por varios lugares. Pero lamentablemente es está muerto, ya no da para hablar de los muertos».
«El comienzo no fue fácil. Una de las personas a las que hay que hacerle un agradecimiento eterno fue el Despachante Torino, que cuando nos emancipamos y yo gané las elecciones, vino y se colocó a disposición que para lo que nosotros precisáramos».
«En aquella época nos dio escritorios, máquinas de escribir (en esa época habían muy pocas computadoras), nos ayudó en todo para salir adelante. Fue una de las personas como otras más que también lo hicieron y ayudaron de una u otra manera».
«Creo que la emancipación fue algo que emocionó a todos. Porque, por ejemplo, personas que eran contra la emancipación, totalmente en contra, después fueron candidatos. Una cosa que no se podía creer porque si sos contra, después no puedes ir a ser candidato por lo que eras contra. Hubieron varios casos de esos. Pero creo que lo más importante es que Chuí se emancipó en el momento exacto».
«Después de haber pasado por un gran sacrificio porque fue un gran sacrificio. Solamente nosotros, yendo a Porto Alegre en auto dividiendo el combustible porque íbamos casi todas las semanas. Había que ir a hacer marketing con los Diputados. Habían Diputados bandidos, Diputados que te pedían cuánto le íbamos a pagar, había de todo».
«Nunca me voy a olvidar de uno famoso de Caxías que lo llamaban «-O rei do jogo do Bicho- y se llama Festugato. Ese nos ponía contra la pared quieriendo sobornar. Mira que pasamos sacrificios, solamente nosotros estábamos ahí en ese ruido. Amilton también que era el Presidente de la Comisión».
«Creo que la fiesta es muy importante y cada año debe tener mucho más fuerza. Recuerdo que inventé la torta el primer año de un metro, después de dos metros y hoy tendría que haber una torta de 24 metros. Mi deseo es que cada vez se haga una fiesta más linda, mejor, más organizada».